Taxi Valle de los Caídos
Es difícil llegar al Valle de los Caídos desde Madrid u otros puntos de la Comunidad. Si coges el tren, tendrás que bajarte en Collado Villalba o San Lorenzo de El Escorial, pero necesitarás otro transporte para llegar, pues está muy lejos para ir andando. Por eso muchas personas nos piden un taxi al Valle de Los Caídos.
Visita con taxi el Valle de los Caídos
El Valle de los Caídos tiene una gran importancia histórica, ya que allí están enterrados casi 40.000 cuerpos de las víctimas, a partes iguales de los dos bandos de la Guerra Civil española. Además de por su significado, se trata de una enorme construcción de mármol que impresiona, en un bello entorno natural del valle de Cuelgamuros.
Consta de, principalmente, tres puntos de interés, a los que puedes llegar fácilmente con nuestro taxi:
La cruz del Valle de los Caídos
Se trata de una gran cruz de hormigón armado. Se construyó al terminar la Guerra Civil. En un inicio, fue pensada para homenajear a las vícimas del bando de Franco, pero luego se decidió alojar también allí a las víctimas del bando republicano.
La cruz mide 150 metros de altura, y en sus brazos tiene una anchura de 48 metros. En su base se encuentran las esculturas de los 4 evangelistas que representan las virtudes cardinales de la justicia, la templanza, la prudencia y la fortaleza. Se accede por medio de un ascensor desde el interior de la montaña.
La Basílica excavada en la roca
Esta Basílica resulta muy impresionante, ya que está excavada en la roca, en la base de la montaña donde se encuentra la cruz. Su interior también cautiva, debido a la semioscuridad y la tranquilidad que reinan allí.
Sobre la puerta frontal hay una escultura de la Piedad y, en su interior, destaca la Cúpula del Mosaico, situada sobre el crucero.
El sepulcro de Franco estuvo en esta Basílica antes de ser trasladado a Mingorrubio-El Pardo. Tras sus capillas laterales están los restos de los caídos en la Guerra Civil de ambos bandos.
Abadía Benedictina del Valle de los Caídos
Esta abadía se construyó al final de la década de 1950 para atender a la Basílica excavada en la piedra y tener un uso más espiritual. Está habitada por 20 monjes y no es visitable, pero merece la pena ver su exterior y la gran explanada ajardinada con dos estanques que hay frente a la Abadía. Está situada a un kilómetro de la Basílica, pero también podemos llevarte en taxi.